El clan del viento estaba yendo de mal a peor.
Si estaban en lo más bajo, ahora estaban cayendo en picada hacia las profundidades terrestes, como si fueran agujeros de conejo profundos que no hacían más que hundirse cada vez más.

La decisión de su líder persistía en su cabeza, reproduciendose una y otra vez como un constante recuerdo a lo más bajo que habían caído como para tener que recurrir a solicitar ayuda a un clan vecino del cual jamás hubo interaccion más allá de simples palabras en las asambleas.

Pero todo fuera por permanecer su supervivencia de ella y los suyos. Si tenian que sacrificar su orgullo, no había nada más que aceptarlo con resignación y aferrarse a ser persistentes.

Con esto en mente decidió que cada anochecer, tomaría un trabajo extra, saldría a cazar justo cuando el sol del alba caía y la oscuridad del manto nocturno recibía la paz que ofrecía el anochecer. Todos descansaban en sus lechos, relajando sus músculos tensados del agotamiento de sus deberes. Pero no ella, tenía que dar sus últimas energías para brindar un poco más de probabilidad de brindar posibilidades de saciar el hambre de los suyos.

Salió del campamento con sigilo, saludando a los gatos que estaban en turno nocturno, agradeciendo que no le hiceron cuestionamientos. Se sumergería entre los pastizales,abriendo sus fauces en búsqueda de el aroma de algun animalillo al cual tomar desprevenido.

Pronto entre los pastizales pudo visuallizar la figurilla de un conejo a la distancia. Si lo capturaba seria todo un festín... Rápidamente se puso en posición, agazapandose entre la hierba, con el pecho arrastrando entre la hierba, sus zancas se tensaron preparandose para saltar. En cuanto vió el momento perfecto, saltó en dirección a su presa.

El miembro 'Lágrima Ambarina' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Acción' :